El miedo solo sirve para perderlo todo.

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La soberbia es capaz de matar,

A un hombre débil,

Vos sos tan soberbio,

Yo soy tan débil,

Por favor no me mates.

Por favor.



Estoy sentado en el piso, en un rincón de mi casa, abrazo mis piernas muy fuertes mientras tiemblo.

Tengo miedo de morir,

No me mates por favor.

No me mates.

Por favor.



La soberbia es capaz de matar,

A un hombre débil,

Yo soy tan soberbio,

Vos sos tan débil,

Por favor no te mueras.

Por favor.



Estoy sentado en el piso, en un rincón de mi casa, abrazo mis piernas muy fuertes mientras tiemblo.

Tengo miedo de matar,

No te mueras por favor.

No te mueras.

Por favor.



La luna camina descalza sobre los tejados de mi casa, yo miro las estrellas tratando de entenderlas. Camino por mi camino, una estrella ilumina mis pasos, el resto ilumina mi pasado, tan cruel y soberbio como mi destino.
La noche se tiñe de blanca y mi olfato se agiliza. Tus besos me manchan la almohada, y mis sueños se paralizan.

Tres cuentos hay en el balcón de mi casa, pero ningún escritor cobarde se animará a escribirlos, porque uno habla del viento, el otro del olvido, y el tercero, no habla, solo describe el silencio, inalcanzable.

Un hombre canoso canta sobre un parlante un rock & roll y me embriaga el alma de preguntas, cuando describe mi andar.

Mírame a los ojos ahora, justo ahora, cuando leas esto, y dime a que temes, y hasta donde correrías para que no te alcance todo eso.

Yo le temo a la oscuridad, a la ducha fría, al fernet sin hielo, a los amanecer chamulleros, a las lapiceras que se quedan sin tinta, a las voces que no se escuchan, a la música en silencio, a los vientos que me vuelan, a la fuerza de la madre, a los besos de mi padre, a la bolsa de basura, a los perros de la calle, a los colectivos vacíos, a las luces apagadas, y aunque parezca raro, también temo de mi.

- ¡¡¡mírame!!! – Le grite a la pared blanca de mi cuarto – ¡¡¡mírame!!! – Repetí en un grito mas fuerte, mientras mis puños apretaban el viento que corría en mi habitación – ¡¡¡mírame!!! – Grite con el último aliento que me quedaba, pero nadie me vio.
Por esto escribo, nada más, quizás si buscas detrás del corazón, veras que deja un papel con una historia escrita, y veras que sigo vivo, que no he muerto, gracias.



Un hermoso día vio Florencia por la ventada de su habitación al despertar. Su madre le preparaba el desayuno como a ella le gustaba, con el mate y las tostadas con dulce de leche. Flor estaba recostada en su cama haciendo fiaca y sin sacar la mirada de esa ventana. La madre entra a la habitacion con su desayuno, reposa la bandeja en las piernas de su hija y le da un beso en la frente deseándole un buen día. Este pequeño y sencillo acto marco a la niña, que soñaba con ser escritora, para toda su vida. Desde entonces, Flor, todos los días al despertar le pedía a Dios nunca perder el amor que recibía y que daba.
Al terminar su desayuno, intento pararse para comenzar con su día, para seguir con su vida, pero no pudo, en ese momento recordó su discapacidad en las piernas, llamo a su madre para que la ayude a subir a su silla de ruedas, ella la ayudo con placer, y Flor, con el correr de los años, fue una gran escritora.



Soy Iuse, El extranjero. Gracias!



Bueno es ir a la lucha con determinación
abrazar la vida y vivir con pasión.
Perder con clase y vencer con osadía,
por que el mundo pertenece a quien se atreve
y la vida es mucho más para ser insignificante.



El miedo solo sirve para perderlo todo.





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Leandro, hijo de dos mamas.

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Esto es una historia real, tan real como la tuya y la mía.




Era un día de mucho calor, yo estaba en Milano, junto a Tatú, un amigo filandes que conocí en Italia, caminábamos hacia su casa, la cual seria mi nueva casa por algunos días.
Mi cabeza estaba algo atormentada, pensaba en mi regreso a Argentina, y en ciertas cosas que me duelen y me cuestan entender.
Al llegar y acomodar mis cosas en mi nueva habitación, me recuesto en la cama y mirando al techo repito en vos baja una frase que escuche cantar a Charly Garcia, 


Mamá la libertad, siempre la llevarás 
dentro del corazón 
te pueden corromper 
te puedes olvidar 
pero ella siempre está.


me levanto sin ganas, tomo mi computadora, entro a facebook y veo en mi bandeja de entrada un mensaje de un amigo periodista.
el mensaje decía algo así:

Ronen Szwarc 15 de julio a las 19:11

José mira esta carta me la mando un pibe q es amigo de mi hermana, si podes publicarla en tu blog estaría bueno, es de un pibe q vive con dos mamas, es mas, leyo tu cuento el de juan y pedro y le encanto ahora te la envió si no podes ponerla no importa todo bien.

Al leer esto me sorprendí, no entendí mucho de que me estaba hablando, hablaba de una carta y de una cuento mio, no sabia que quería decir pero me basto con leer la carta que le enviaron para entender, esta decía algo así:

HOLA mi nombre es Leandro Carrizo soy hijo de heterosexuales

mi familia esta compuesta por mama, papa y mis dos hermanas: fin termino lo lindo por el momento. Me críe viendo como mi Papa se borraba y no aparecía por varios días cuando llegaba encima se enojaba con Mama y le pegaba mucho no le pegaba así nomas le pegaba por pelotudeces y siempre lo hacia una y otra vez hasta que se separaron; me dije bárbaro terminaron los golpes pero no fue así.

Con mis hermanas fuimos a vivir con mi papa y de mi mama no supe nada hasta los 13 años, tenia 9 cuando se separaron 4 años sin saber nada, ni un llamado, carta señal no sabia si estaba viva o muerta. ¿Que hizo? Se fue a vivir con el remisero que me llevaba al cole desde 3er grado.

Tenia 13 años ni idea de Internet ni celulares nada un bruto total, hasta que acomodando todo me di cuenta de que mi mama estaba ahí con el remisero. Le pedí a mi papa que me lleve con ella porque siempre me dio palizas terribles que jamás me las olvido, JAMAS, siempre pegándome por pelotudeces, ni a la vereda salía y eso que tenia el mejor promedio del curso.

En fin, cuando veo a mi mama me dio una felicidad increíble estaba embarazada de un par de meses, mi papa le pego una trompada que le inflamo toda la boca así fue el reencuentro.

Ahora tengo 19 años y nose

capaz mi vieja se calienta con un remisero, heladero, panadero y deja tirada a mi hermana como lo hizo conmigo. ¿Por que? por que es una mujer sumisa. Viví con mi vieja y su pareja, no tenia afecto ni un beso o abrazo xq su esposo se ponía celoso y yo me daba cuenta de eso hasta que volé.

No cumplí 14 años que ya estaba viviendo en la calle, así empezó mi desamparo viví con mi amiga Sole unos meses, con Solange otros meses también con mi tía Daniela, hasta que caí de nuevo con mi papa xq todo iba a ser diferente y volvió a golpearme. Viví con mi abuela hasta que me fui xq no estudiaba me sentía un vago y empecé a vivir con un amigo trabaje, perdí el empleo y de nuevo a la calle, no sabia que hacer

Estaba desesperado sin saber donde ir. Viví con un amigo heterosexual que nunca entendió que un favor no se cobra con sexo ni nada por el estilo me fui de su casa (no me paso nada gracias a dios). Fui a vivir con mi prima Vanina estuve unos cuantos meses bárbaro hasta que sus tíos se quedaron sin hogar y tuve que darles el mío xq son personas mayores. De nuevo a la calle ahí FUE cuando vine a vivir con Marce y Vane unas amigas lesbianas que conocí en el 2007, ahora estoy viviendo con ellas y sus dos hijas heterosexuales una de 4 anos sabe que tiene dos mamas y eso no le afecta en nada No es una chica gay de 4 años es mas le gusta un chinito el hijo de una chica cajera del supermercado, mi otra hermana tiene 14anos y tampoco sufre. Ya pasaron unos cuantos meses soy feliz como nunca lo fui tengo DOS MAMAS y me aman me aconsejan me cuidan se preocupan por mi, me dicen hijo y las nenas dicen que soy su hermanito mayor.

19 años de mierda pase en mi vida 19 para saber lo que es una familia

¿Que es una familia? ¿Un Papa golpeador y una Mama sumisa? NO para mi una familia es lo que yo tengo orgullosamente DOS MAMAS homosexuales que me aconsejan de todo pero de todo cosas que nadie me explico y solito aprendí, dos hermanas hermosas con las que me río, juego, peleo además salgo a matiné a llevar a la mas grande y me quedo con ella aunque no me guste la matiné pero si disfruto acompañarla porque es mi hermana.

Me levantan a la mañana Mama me dice Lean vamos a desayunar después limpiamos o nos vamos a comprar cosas para la casa o como hoy mama tenia que ir a trabajar a las 7 PM y se fue un ratito conmigo a la marcha de la igualdad y de ahí al trabajo, eso que había dormido mal. Vamos a pasear a los juegos

jugamos a la pelota en la plaza. Somos una familia feliz: MAMA +MAMA + 3 HIJOS eso para mi es una familia perfecta a los 19 años descubrí el significado de la familia

Creo que no tengo nada que decir al respecto, Leandro a dicho todo lo que debemos entender, luchar por la igualdad y por el amor. 

Gracias Leandro.

Iuse, El extranjero.

Mamá la libertad, siempre la llevarás 
dentro del corazón 
te pueden corromper 
te puedes olvidar 
pero ella siempre está.

El amor es...

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Alguna vez Como a todos nos ha pasado, me pregunte ¿qué es el amor? Intente buscar la respuesta en libros, canciones, especialistas, revistas, poemas, viejas parejas que aun conviven, madres e hijos, perros y solteras desesperadas, y en muchos lugares más, pero nada encontré, solo palabras que no decían nada.

Era el 21 de julio de 2009, cuando Juan y Pedro estaban recostados en el suelo de la casa del primero (ubicada en García, un pequeño pueblo rural). Pasaron así un largo rato abrazados hasta que Pedro se para y le dice - vístete y acompáñame-

- ¿A dónde quieres que te acompañe? - pregunto Juan sorprendido por su propuesta, ya que estaban tan tranquilo acostados en el suelo disfrutando del momento y relajado porque recién acababan de hacer el amor.

- no importa, tu vístete rápido y vamos, no preguntes nada mas, solo sígueme - le respondió Pedro con una sonrisa en la cara.

Juan se paro, agarro su ropa y se vistió para seguirlo.

Salieron de la casa algo apurados, Pedro iba adelante y Juan le seguía los pasos, corrieron media hora por el campo hasta llegar a un cerro, lo subieron, y cuando llegaron justo a la cima, Pedro se detuvo y fijo su mirada en el horizonte, Juan se paro junto a él y miro el mismo punto, ambos se tomaron de la mano sin sacar la mirada de aquel lejano horizonte.

El silencio estaba presente junto a ellos, una brisa acariciaba sus cuerpos, y el sol caía lentamente dejándole lugar a la luna y las estrellas.

Juan aprieta fuerte la mano de Pedro y él le responde con un beso en la boca.

-¿Sabes que siento en este momento?- le pregunto Pedro a Juan.

-¿Qué sientes?-

- que te amo, y que dejaría todo lo que tengo para que este momento dure para siempre, siento amor, y sin saber ni lo que es, hace muy poco que te conozco y me animo a decirte que te amo, como Nano ama a aquel ser, y seguramente aquel ser ama a alguien, y estoy seguro de mis palabras, porque si esto no es amor, no existe-

Juan sonrío - Te amo - le dijo mientras rozaban sus narices y la felicidad recorría sus cuerpos.

Otro beso se hizo presente en aquel cerro.

Al despegar sus bocas, volvieron a mirar al horizonte y después de unos minutos Juan miro los ojos de Pedro le dijo - amar y saber… son dos acciones tan distintas, una del corazón y otra de la razón, no sé porque la gente confunde tanto a veces, o porque los limites a veces son tan difusos… hoy creo que es la primera vez que supiste que quiero decir cuando digo que te amo… y tiemblo -

Pedro comienza a sentir el temblor de aquellas mano empapadas de amor - gracias, no sé porque antes no me daba cuenta, quizás porque no me animaba a sentir algo que no sé que es -

- ¿Y ahora estas dispuesto a sentirlo por mas que no sepas que es?-

- sí, estoy dispuesto, acabo de abrir mi corazón mientras nuestros cuerpos estaban recostados en el suelo de tu casa y mi alma miraba desde lo alto como nos abrazábamos, pude ver y sentir, y entendí que el amor no tiene secretos ni vueltas, el amor no es algo que nosotros podamos entender, el amor es un sentimiento hermoso que se da a través de los ojos, mas allá de los ojos, las miradas, el amor empieza con una mirada y la gran mayoría de las veces termina con una lagrima, el amor empieza y termina en los ojos, mas allá del corazón que es donde se siente. Y si me preguntas porque, no me animo responder con seguridad, quizás me animaría a decir que es porque a través de los ojos se puede ver el alma de las personas, se puede ver la naturaleza del ser que tenemos frente nuestro, la belleza del ser que amamos o que elegimos para amar, te puedo ver a vos. Sinceramente no sé que es el amor, y ya no tengo más intención de saberlo, pretendo sentirlo y disfrútalo mientras dure. Entendí que el amor no es algo que se pueda definir, no es una cosa, no tiene un significado, no es una acción.

El amor es. Y los amores verdaderos serán los que subsistan en este mundo tan ajeno a este sentimiento. Los amores verdaderos soportaran tormentas y brisas. Los amores verdaderos tendrán lugar en el tiempo, como tú tienes lugar en mi corazón.

Por siempre. -

 A Juan se le cayó una lagrima que Pedro tomo con su dedo índice y la coloco en su boca, la luna se hizo presente y juntos desearon que esa noche no termine mas, nunca más, pero esa noche termino, y los días pasaron, mientras su amor crecía.

Después de escribir, releer, corregir, y publicar este texto me di cuenta de lo bello del amor, del saber, y de la vida, que tiene esos momentos únicos que nunca más volveremos a vivir.

Estoy sentado en mi escritorio mirando un café que ya esta frio y un cenicero lleno, mi alma esta con migo, sonriente, y yo con ella sonriendo, quizás por darme cuenta de todo esto. 

Soy Iuse, El Extranjero. Gracias!

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En el agua

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A Beban, una persona que supo comprender mi necesidad en las palabras.




Mientras un conductor de noticiero anunciaba el nacimiento de un nuevo ser, pero la muerte de muchos mas, en su programa de la noche.

Un niño dejaba olvidado su juguete nuevo en el tram de la línea 29/30 con dirección a Porta Genova.

Una pareja se besaba en la escalinata de una iglesia en Haití.

Otra pareja se separaba en Singapur.

Dos perros se peleaban por un trozo de carne.

Un obeso intentaba atarse los cordones y no podía.

Una comunicación telefónica de larga distancia terminaba de la peor forma posible.

Tres madres daban a luz, una en Santiago de Chile, otra en New York, y la otra en Ámsterdam.

Un pelado al que le gusta fotografiarse junto a perros que tienen mucho pelo acariciaba el alma de aquel ser recién nacido.

Un suizo comenzaba a subir una escalera.

Dos niños jugaban a ser astronautas, un llego a la luna y el otro no.

Beban me enviaba un cuento que escribió para mi llamado “La Lección.”

Tres motos amarillas chocaban en una esquina de Helsinki.

Y todo el mundo continuaba con su rutina habitual.


Me dieron ganas de sentarme a escribir, pero no se me ocurrió nada, así que cerré mi cuaderno, guarde mi lapicera que me regalo un desconocido en el tren a Lago di Como y me fui a sumergirme en un canal de agua de Milano con la intención de buscar todo eso que Andrea dijo que había.
Ella, mientras que fumábamos un pucho y después de leerle un cuento que escribí una vez y nunca me anime a publicar, me dijo que dejar es fácil y que no me preocupe por lo que me hace falta porque en el agua hay mucho mas.
Al sumergirme en el agua sentí todo eso que dijo Andrea, sentí eso que me hacías falta hasta ese momento, abrí mis ojos y pude ver mi alma sonreír junto a todo eso.

El agua me abrazaba, acariciaba todo mi cuerpo y hacia de mi nostalgia la felicidad, hacia de mi tedio un soñador, de mi hambre la fuerza y de mi lo que siempre anhele ser.

Fue ahí cuando entendí las palabras de Andrea, y el cuento de Beban.


Iuse, El Extranjero.

La Lección

Tomás era un niño de unos seis años que estaba descubriendo el mundo que lo rodeaba. Le llamaban mucho la atención los atardeceres, los pinos, las cosas de color verde y ver a su abuela convertir un montón de cebollas, papas y huevos en la deliciosa tortilla de los sábados al mediodía (al crecer recordaría emocionado esos sabores y olores que lo remontarían a su niñez).



Esa tarde de marzo, Tomás descubriría algo nuevo…



Su padre lo llevó a jugar a la plaza del barrio, como muchos otros días de ese caluroso verano de 1994. En cinco días comenzaría la escuela primaria y daría sus primeros e inocentes pasos, ya no como “Tomy, el nene de Daniel”, sino como Tomás Maloberti. Obviamente Tomás no pensaba eso, pero su padre si. Es más, para Daniel era muy importante que su hijo comenzara a aprender las lecciones que lo acompañarían por el resto de su vida. Por eso, en el camino de regreso, al pasar por la vieja bicicletería de Don Luís, Daniel señaló la bicicleta que su hijo miraba casi todos los días a través de la vidriera con los ojos llenos de luz, de sueños…



- ¿Te gusta esa bici Tomy?



Tomás asintió velozmente con la cabeza sin dejar de admirar el anhelado rodado.



- ¿Qué ves? -Preguntó Daniel haciendo que observaba la vidriera mientras miraba de reojo a su hijo-.



- La bici -Contestó Tomy que no despegaba la vista de la vidriera-.



- Si si, ya sé, pero… ¿Qué más?



El pequeño reposó su mentón entre los dedos índice y pulgar de su mano izquierda en señal de estar pensando. Esto generó una sonrisa en el rostro de Daniel, que pronto disimuló para seguir con la lección.



- Hummm... es verde, brillante, y… y las ruedas son redondas y gordotas…



- Ahá, pero… y además de eso… ¿Qué ves?



Tomás ya no sabía qué responder cuando de pronto descubrió algo más, algo que había estado delante de él todo el tiempo y no había notado… Su Reflejo…



- ¡Me veo a mi en el vidrio! -Dijo exaltado-



- ¡Muy bien! Es tu reflejo, ¿Qué ves en él?



- Veo… -Tomás se quedó inmóvil, observándose fijamente en el vidrio-



- ¿Vamos? -Preguntó Daniel- Mañana volvemos…







Al caer el sol, Daniel llevó a su hijo a la cama donde, al igual que todas las noches, le contó uno de sus cuentos en los cuales (y siempre con gran talento) fusionaba historias del cine de los ´60 ó ´70 junto con alguna anécdota propia, para crear excelentes fábulas que apasionaban a Tomy y lo sumergían casi mágicamente en sueños increíbles.

Pero esa noche no sucedió esto último, ya que el niño aún pensaba en su reflejo, y continuaba tratando de entender qué era lo que su padre esperaba que vea en él…





Luego de que Daniel fuera a descansar a su cuarto, Tomy (que había simulado quedarse profundamente dormido por primera vez en su vida) se levantó de su cama y se dirigió sigilosamente al baño; donde luego de acomodar su banquito en el cual se paraba para cepillarse los dientes todos los días, se quedó un largo rato mirándose, observándose…





La tarde siguiente, ambos se dirigieron a la plaza donde pasaron dos horas divirtiéndose y viviendo ese amor eterno que une a padres e hijos…





Al comenzar el camino de regreso a casa, llegaron nuevamente a la vidriera de la bicicletería de Don Luís, donde se detuvieron ambos al igual que la tarde anterior.



- Tomy, ¿Te acordás de lo que hablamos ayer? -Preguntó Daniel expectante-



- Si pá…



- Bueno, ¿Te ves en el vidrio como ayer?



- Si si -Tomy respondió intrigado-



- Bueno, ahora te tengo que decir algo pero no tenés que dejar de mirar tu reflejo en el vidrio, ¿Dale?



- ¡Dale!



- Vos nunca vas a poder tener esa bicicleta, es mucho para vos…



Los ojos de Tomy automáticamente se apagaron; dejaron escapar esa luz que los llenaba de sueños, de cosas imposibles. El niño observó esa transformación en su reflejo, y sintió que un vacío indescriptible (ya que nunca lo había sentido) se apoderaba de su pecho… Sin mediar más palabras ambos siguieron el camino de regreso a su casa.





Esa noche, luego de arropar a su hijo en la cama, Daniel le explicó que no habría cuentos, que tenía que hablarle de lo que había sucedido esa tarde en la vereda de la bicicletería de Don Luís…



- Hijo, te tengo que confesar una cosa. Hoy te dije algo que no es verdad; buscaba prepararte para situaciones que te van a suceder muchas veces en la vida. Hay personas que a lo largo de tu camino te van a decir cosas como las que te dije hoy. Van a tratar de apagar esa luz de tus ojos, buscando convencerte de que no sos capaz, de que hay cosas imposibles y que la vida es una mierda.



Los ojos de Tomy estaban muy atentos a las palabras de su padre…



- Vos nunca tenés que dejar que palabras como las de hoy te afecten. Siempre creé en vos y todos los días al levantarte, mirate al espejo y buscá esa luz que hay en tu mirada. Mientras esa fuerza que hay en tus ojos siga viva, no va a haber cosas imposibles. Vas a poder volar; vas a poder ir a la luna; vas a poder ser lo que quieras ser; vas a poder ser vos; y lo más importante, vas a ser feliz…



En ese momento el niño se quitó las sábanas de encima y se sentó junto a su padre.



- Pá, yo también te tengo que confesar algo -los ojos de Daniel se abrieron igual que los de su hijo-. Anoche no me dormí cuando me contaste el cuento. Después de que entraste a tu habitación me fui al baño a mirar mi reflejo y encontré esa “luz” de la que hablás, en mis ojos. No sabía que era, pero me sentí muy bien al verla y me sentí mal porque la gente triste que veo a veces en la calle no la tienen. Por eso me prometí anoche que nunca la voy a dejar ir, y que siempre voy a tratar de que los que la perdieron la encuentren nuevamente…



Los ojos de Daniel se llenaron de emoción…



- Entonces ¿Por qué hoy cuando te dije que nunca ibas a poder tener esa bici tus ojos se apagaron?



- Porque pensé que siendo un adulto, todavía no entendías el significado de esa Luz…



Esa noche ambos se acostaron con sus miradas embriagadas de Luz… Nunca más la dejarían ir…







Daniel acababa de recibir la lección más importante de su vida…











Beban.

http://elnudorequiem.blogspot.com/




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