Seguidores

lunes, 5 de agosto de 2013

Hoy en día puede ser un crimen pensar.

.


Hoy por la tarde me paso a visitar un viejo amigo que la verdad, aunque no sea alguien que vea muy seguido en mi vida, tenía muchas ganas de abrazarlo y saber cómo estaba. Luego de unos saludos muy amistosos y repleto de cariños sinceros que hacen a dos personas amigos me comenzó a contar algunas cosas de su vida y yo de la mi e intentamos ponernos al día uno del otro en un corto rato que yo tenía para volver al trabajo y el para ir a la facultad.
En una de sus cuentos me comento que estaba con un proyecto nuevo que siempre quiso hacer y que estaba muy contento y poniéndole mucha fuerza para que funcione. Realmente en ese momento me puse muy contento porque sabía que eso que quería hacer es lo que realmente ama y sueña hacer de su vida y pensé “que lindo es escuchar gente que aún se arriesga a cumplir sus sueños”.
Sentía en ese momento que si eso que quería hacer le salía iba a ser libre, iba a ser, de una vez por todas las luchas que paso en su vida, iba a ser quien realmente quiere ser, esa persona con alas volando en el mundo que realmente le pertenece y le gusta del arte. Que iba a ser libre y seguramente pasaría muchos ratos de alegría por hacer lo que quería hacer. El solo me conto que estaba comenzando a cumplir su sueño de armar un centro cultural donde los artistas se unan para comunicar lo que siente e intentar desestructurar mentes sea donde sea que se encuentre arte, sea de la forma que sea, diga lo que diga, pero que sea arte, que sea amor, que sea libertad.
Entre tantos intercambios de pensamientos sobre este tema, y en un contexto que me pareció el correcto para decir - Hoy en día puede ser un crimen pensar y convertirte eso en un preso. – yo solo me quede en silencio mientras lo escuchaba hablar de fondo como si fuera parte del paisaje del teatro Colon por unos pocos segundo, sentí que esas palabras me llegaban a donde no creí que podían llegar. Automáticamente relacione esas palabras con la política, pero no me pareció que tenían mucho que ver por el contexto en el que estábamos y para ser realistas vivimos en un país democrático, quizás más o quizás menos para algunos, pero dentro de todo uno cree que es democracia aunque no sepa de qué se trata eso. Si realmente es eso que nos cuentan como tampoco sabemos si cada  instante que pasa nos arrebata un pedazo de rostro como dijo Oscar Wilde.
La charla continuo luego de esa frase y quedamos en vernos e ir a unas de sus varieté que están haciendo en el centro cultural, allá por Berazategui el 28 de Agosto, y cuando termino el pucho que le convide, se paró y se despidió de mi – Bueno Negrito, te dejo que tengo que ir a la facu… – Lo abrace y prometimos vernos ese 28, el camino por la plaza y tiro las colillas de cigarrillos en el cesto de basura como suele hacer, “nunca va a dejar de cuidar al mundo por mucho tiempo que pase”.
Mi día continuo y seguramente el de él debe haber sido algo más largo que hasta el punto en el que yo lo perdí de vista.

En un momento de la tarde me volvió a la mente esa frase y comencé a pensar y tratar de entender como uno podía ser preso por sus propios pensamientos. Ahí fue cuando intente compara esa definición con actos cotidianos de las personas y acciones interminable y repetitivas que vemos todo el tiempo en los demás y que uno también participa de esa coreografía que nos hacen bailar con una mala música de fondo.
Ahí sentí tristeza porque entendí a que se refería el cuándo decía lo decía y que esas palabras tristes y que te llenan de impotencia de no tener libertad son reales. Porque la gran aparte del mundo vive preso de un pensamiento que nos vendieron una vez y nosotros sin saber lo estamos comprando cada vez más. Porque uno vive para creer que los sueños se pueden hacer realidad y no que los sueños se hacen realidad. Que el que arriesga pierde y no que hay veces que se puede ganar. Que el amor duele y no que está lleno de momentos lindo en una relación. Que los recuerdos son tristes y no que hay días que viviste que te hicieron sonreír y que muchos también te hicieron llorar, pero ya va a pasar con el tiempo según dicen. Yo no sé si el tiempo pasa por mí, pero vos aun seguís doliendo dentro mío. Que la muerte mata y no que continua uno murindo como los hace viviendo cuando eta vivo. Que las hojas caen de los arboles y no que la primavera llegara algún dia. Que el frio de las oglesias es triste pero no saben que el de la calle es peor para quien duerme ahí.
¿Hoy en día las penas se superan? Me pregunte y ahí yo no quería pensar que eso pasaría si podría tocarte.
Me quede con tantas cosas en mi boca que no te di ni te dije que aún no se si exististe porque siento que jamás te dije nada y si alguna vez hablamos, espero haber sido sincero y que me hayas escuchado, porque si hoy pudiera hablar con vos y contarte eso que muero por que sepas, los recuerdos serian una sonrisa y no una pena que olvidar. Porque un sueño se cumpliría y no dejaría de ser algo que podría llegar a hacer. Porque un miedo dejaría de ser miedo y serian hechos de valentía y libertad. Porque el cielo estaría ahí, justo arriba nuestro ahora y brillaría como un nunca más lo podría volver a hacer.
Tal vez yo no tenía sonrisas ni un sentido al que ir, vos me diste un camino y yo no supe caminar. ¿Sabías que me encantaba cuando dormías junto a mí y me abrazabas? Y eso lo extraño todas las noches de mis días. No quiero nunca que termine el día porque no estas para poder descansar. Y vivo pensando en vos, en que te extraño, hasta pienso que te necesito aunque yo me sepa cocinar, porque siento que no puedo dormir sin vos, porque un domingo no es domingo sin vos, porque despertarme y girar mi cabe para el otro lado cada mañana y no encontrarte es muy triste. Porque todos los días pienso en vos y que te extraño y no puedo dejar de pensar y pensar y pensar en que no estas y vivo preso de ese pensamiento mi amor. Te pido que vuelvas o que te asomes si estás ahí que salí a buscarte, nada más que eso te pido mi amor.

Ahora entiendo que quería decir Luquitas. A él sí que lo extrañaba de verdad. Las charlas con el son algo que me hacen entender muchas cosas, pensar y a veces escribir. Él es un gran artista, una gran persona, y sobre todo es un gran luchador de su vida. Porque es de los que creen que un sueño si se hace realidad. Porque es de los que luchan contra esa coreografía armada sin ensayo para poder hacer su camino. Por eso Luquita te quiero mucho, y quería decírtelo, porque sé que a los amigos llega un momento de la vida donde los deseos los separan, y aunque sé que a nosotros no nos va a pasar o eso es lo que deseo, quizás sea tarde mañana cuando quiera decírtelo. Por eso aprovecho hoy.
-Te quiero mucho pendejo!

Soy Iuse, el extranjero. Gracias!
La paz comienza en tu sonrisa.



.

miércoles, 10 de julio de 2013

Ya te perdí.

No sé si soy solo eso que dijo o si seré algo más,
Solo sé que he perdido más de la cuenta,
Que perdí hasta mi amor,
Que mis tiempos sin vos no son más de lo que hubo y ya no hay,
Que nunca imagine esta noche sin tu abrazo
Y que la vida me envuelve en preguntas que no tiene respuestas
Aunque no tengan ni sentido de ser lo que alguna vez quise seguir siendo con vos.

Hoy no tengo nada, no me queda ni un poco de resto,
Ni imaginación para amar.
No puede seguir amando y todo eso soñado cayó como una copa de vino a un piso de cristal,
Quizás fui yo quien la tiro, quizás fue solo esto que me llevo a caer con una copa de vino al piso de cristal,
No tengo nada de nada para poder amar,
No tengo fuerzas ni imaginación.

Hoy tengo sueños, sueños hechos agua de cascada que se desarman al caer,
No tengo un viento que me acompaña,
No tengo un camino, me siento perdido sin tus brazos al andar.

Perdí el hilo de la charla pensando en que el día se moría y que la noche llegaría en soledad,
Que la oscuridad de mi cuerpo no tendría tu piel ni nada tuyo sobre mí que valga la pena,
Pero no logro encontrar algo que pueda hacer que mi corazón siga latiendo.

Ya paso más de un año que no estas cuando ayer te fuiste por esa puerta,
El tiempo no va a entender jamás lo tanto que te quise,
Y aunque vos no quieras, tampoco vas a entender porque deje que te fueras.

No tengo ni fuerzas para pegar primero,
Es simple dejarme pegar, señalarme y no escuchar todo lo que tengo y quiero gritar,
Yo sé que no pasa eso de que el amor vuelve cuando alguien ya no está,
Que tampoco vale de nada llamar a la madrugada y saber si estas,
Yo no sé cómo actuar si tengo que hacerlo,
Sé que puedo llorar con mi alma hecha pedazos,
Sé que te puedo lastimar y sin hacerme cargo de eso ni de nada,
Sé que puedo preguntarte muchas cosas y que no vas a saber cómo responder,
Pero cuando quieras estar en silencio, no podrás porque algo te paso,
Por lo menos hoy no tengo dudas de que algo que paso,
Ayer me dijiste que no había preguntas, pero hay misterios que dan miedo,
Que me explican quien sos  y que queres
Sé que no entiendo nada, tampoco el tiempo, como vos, no entendemos,
Pero también sé que entender traería más penas, pero no puedo dejar de intentar.

Solo sé que mi alma está hecha pedazos,
Que mi corazón no tiene fuerzas para latir,
Que mi fuerza no está para pegar primero,
Que no puedo ganar porque ya perdí.

Porque ya te perdí…




Soy Iuse, el extranjero. Gracias!

La paz empieza en tu sonrisa. 

lunes, 4 de marzo de 2013

Así nací yo.




Era una tarde normal, como todas, donde la rutina me lleva tiempos interminables de soportar cosas que uno no tiene ganas de soportar… la injusticia.

Caminaba por una de las calles de Mercedes, esa ciudad tan llena de tristeza y sueños que no muchos se animan a cumplir. Conocí algunos que lo hicieron y otros tanto que lo intentaron, pero tantos eran los otros que no. 

En fin… caminaba por la calle 2 de Mercedes, me acababa de bajar del bondi que me llevo desde casa a… ¿casa? No sé si decir casa porque no es ahí donde vivo, pero si el lugar que me vio nacer, crecer, soñar y animarme a volar. Porque allí fue donde aprendí a escribir aunque mis padres no lo sepan, aunque mis hermanos lo hayan olvidado, aunque ahí pase mi infancia, ahí crecí y ahí nació ella. Ella que me recuerda cada día que soy de allá y no de acá, sino de esa ciudad triste, al menos para mí, que me ata y me lleva y me hace crecer. Ahí está el amor de mi vida, la mujer de mis sueños y más hermosa que jamás conocí. Ahí está Amélie… mi amor.

Bueno… voy a lo que estaba. Caminaba por esa calle mientras era el atardecer quien me decoraba el momento y en una pared algo despintada pero blanca, se leía una leyendo que decía “Así nací yo” y eso me llevo a volver. A juntarme otra vez con el pasado y no tener más opción que pensar.

Mientras tanto caminaba, estaba yendo a buscar a mi hija, ella me esperaba y yo deseaba verla. Los autos entraban y salían de la ciudad y cada una con un sentimiento diferente. El mío, mientras ellos pasaban, era de nostalgia.

Pensaba en esa pared, en esas letras, como que se metieron por mis ojos penetrándolos en un segundo y agarrándose de tal manera que no me soltaban, habían pasado todas las trabas que las dejarían ingresar a mi cerebro y dejarlas pensar, habían estado ahí en la pared mientras yo pasaba, y las leí y las pensé.
Pensé en como nací yo, y cuanto tiempo hacía. No hacía mucho que lo había hecho, unos 24 años y algunos meses atrás. Pero nací de una manera, no como otras personas, no como algún otro que nació en cualquier lugar de mundo, porque nací solo, y somos diferentes vos y yo.
Nací con miedos principalmente como la mayoría de las personas, todos tenemos miedos y cosas que no nos animamos a hacer. De hecho para cualquier cosa que desees hacer siempre hay que atravesar un miedo creo.
Crecí con miedo, porque los tuve durante toda mi vida y crecí con ellos todos mis días.
Tengo miedos, porque hoy están, y cada vez son más intensos, porque ya el miedo descarta la oscuridad, ya el miedo se concentra en seguir creciendo, en crecer, en ser adulto cuando aun quiero ser un niño, porque madurar me parece la decisión más estúpida que uno pueda tomar. Al menos yo, que nací imaginando y con ganas de compartir. Nunca podría dejar de jugar.

Debo confesar ahora que todo este tiempo que me ausente fui un estúpido, porque inevitablemente intente ser adulto, inevitablemente el sistema me arrastro y me llevo a creer en dinero e injusticias, en políticos corruptos y gente de mierda, en el pasado y un futuro consumista sin tener en cuenta que estoy en el presente, a no vivir muchas veces y al miedo a fracasar. Y cuando digo fracasar hablo en serio, especialmente en el amor tengo miedo a fracasar, pero no solo en el amor de una novia o una amante cruel, sino en el amor, en todo lo que eso implica. Y muchas veces huí porque tuve miedo de estar y de afrontar lo que me pasaba, y así deje pasar mis amores, porque así los perdí, porque así perdí a ella y seguiré perdiendo si sigo temiendo. Seguiré así, intentado ser adulto y dejando de jugar. Dejare de ser un niño para ser alguien más del montón, dejare de escribir y solo por no amar. Dejare de ser quien soy o quien quise ser, dejare que el tiempo pase y no viviré nunca. Porque la vida pasa, como el tiempo, el tiempo que pasa.

Existen quienes nos desaniman a no cumplir nuestros sueños, porque ellos creen que no se puede, que es imposible, cuando si lo es, porque yo pude, y seguramente vos también. Ellos que creen que es imposible intentar, porque ahí están los que tienen miedos y no se animan a gritar como yo no me animo a gritar que amo. No importa a quien, amo al amor, a muchos, pero hay que elegir. Intentar es la clave, los detalles son la victoria de nuestros sueños, cada movimiento que uno hace en el camino, cada segundo que uno intenta, cada cielo y cada infierno, cada paso que salga de nosotros. Cada uno es quien es que debe cumplir sus sueños.

Y ahí está el tiempo, pasando por nosotros esperando a que uno haga, pero no se detiene, porque se empeña en trascurrir cuando a veces debería permanecer detenido, porque si el tiempo se quedase ahí inmortalizando a los seres y a las cosas en su punto justo, no todo sería tan difícil como parece que lo es, como romper los miedos para moverse y volar.
Para sonar y seguir jugando, aunque muchos se empeñen en que no lo hagamos, porque a ellos les conviene seguramente, o porque son malos, gente de mierda que te tira atrás cada ánimo y ese poquito de fuerza que uno logra juntar para romper.

Y son ellos o nosotros…
¿Y si son ellos?
Ellos me parecen absolutamente detestables por cierto.
Eso es lo que no hay que permitir. Que ellos ganen, porque vos podes, porque tenes alas y sos libre aunque creas que cosas te atan. Porque sos vos y solo vos quien puede lograrlo, quien puede soñar, quien puede imaginar y no dejar de jugar. Porque soy yo quien debo hacerlo, como vos… pero para eso es necesario romper el miedo. Por mucho que duela, por más que el tiempo siga corriendo siempre uno tiene que intentar y lograr.

Y así nací yo, imaginando y escribiéndote, quizás sin sentido, pero con sueños y miedos que quise gritar. Y no tengo otra cosa más que decirte – Gracias por compartir -  porque con leer estas palabras, en invertir tu tiempo en esto ya estas compartiendo un momento con mis palabras, con lo que quise decirte.

Porque así nací yo. Y no son muchas las veces que no soy más que esto que escribo. Porque tengo miedo a amarte como mereces que lo haga.
Porque temo.
Porque duele.
Porque no sé qué decir ni qué hacer cuando te tengo enfrente, y menos cuando no estas.
Y por eso escribo esto. Porque necesitaba decirlo para poder volver a mi lugar. A este, mi sueño, mi mundo y mis ganas que alguna vez olvide por intentar madurar, por ser un estúpido, por llevar ese miedo conmigo.
Porque hoy tenía ganas de gritar y de volver acá.
Porque así nací yo.


Soy Iuse, el extranjero. Gracias!
La paz comienza en tu sonrisa.


.