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sábado, 5 de junio de 2010

Loco por ti.

“Un elefante se balanceaba sobre la tela de una araña, como veían que resistía fueron a buscar otro elefante”, así es como empieza nuestra niñez, cantando una canción nada cuerda, algo que no es lógico, algo que seguramente escribió un loco.



No sé en que estaría pensando, pero cometí un error y solo por sentir, esta mañana estaba preparando el mate, agarre el paquete de yerba y coloque el termo en lugar más seguro para que no se caiga y derrame el agua caliente, en ese momento, justo cuando voy a llenar de yerba el mate siento el anillo que tengo puesto en mi mano izquierda, y cometí un error, en vez de colocar la yerba donde debía, me confundí y la eche adentro del termo donde estaba el agua lista para cebar unos buenos mates. Me reí solo, después de maldecir lo ocurrido, mire al cielo, no quise decir nada, pero mi corazón si y grito muy fuerte ¡¡¡TE EXTRAÑO!!!

Acá estoy, otra vez, en esta vieja ciudad llamada Milano, soy José, un loco, como vos.

Para mi abuela soy un loco lindo, para mis padres quizás un loco bueno con algo de malo, para algunas personas un falso loco y para otros simplemente un loco, uno más del montos, uno más, como vos y yo, porque al fin y al cabo todos estamos algo loco, lo único que cambia es la forma de de canalizar la locura, creo que no existen personas cuerdas en este mundo, creo estar loco por vos.

"La locura es un don que solo los locos disfrutan" dijo un loco al salir del manicomio, y creo que es cierto.



Existen locos buenos, malos, peligrosos, infantiles, deseosos, soñadores, esquizofrénicos, consientes e inconscientes, ricos y pobres también, filipinos y escoceses como también los argentinos, científicos malvados o mas malvados, locos políticos, locos hippies, locos cuerdos, locos que creen ser vegetales o animales, o que piensan que tienen alas o que son libres, locos que se creen presidentes de naciones o reyes de imperios.

Ayer, mientras paseaba por milano en el tranvía de la línea 29/30, justo cruzando las calles Picasso y César Augusto Germánico Nerón “dos grandes locos de la historia, Picasso tenía una mamá muy loca que como muchas madres quería que su hijo fuera especial, (este tipo de locura te lleva a poner nombre extravagantes), el nombre que su madre eligió para este loco pintor es Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno Crispín Crispiniano de la Santísima Trinidad Ruiz Blasco Picasso y López. Y el señor Nerón, emperador de Roma, con su locura desencadenada por la frustración, Cuando un terrible incendio azotaba la ciudad, este loco tocaba la lira y cantaba, así demostraba su angustia por ser un artista frustrado” mientras el tranvía avanzaba, un hombre rubio, que después resulto ser finlandés, se levanto de su asiento y comenzó a gritar en español - ¡¡¡¿Quién coge mis perros? Malditos cabrones, ¿Quién los coge? Yo soy el rey, yo soy el rey de Finlandia, pendejos los matare!!! – todos los que estábamos en el transporte nos asustamos aunque muy pocas personas entendimos lo que dijo ya que estamos en Italia y no todos conocen el idioma en el que el finlandés grito con fuerza, con los ojos grandes y saltones, con mucha rabia, parecía peligroso, nervioso comenzó a girar en el lugar, dio varias vueltas y se volvió a sentar en su asiento cuando el tranvía freno y por suerte yo tuve que bajar.

Camine por vía Farinni, y encendí un cigarrillo que acababa de armar con tabaco natural, mientras que en mi cabeza me preguntaba ¿que abra querido decir ese hombre? ¿Qué fue lo que lo hizo reaccionar así? ¿Qué pasara en su cabeza? ¿Qué paso en su pasado? Era extraño, un finlandés que hablaba español en un tranvía de Milano preguntando quien coge sus perros y amenazando de muerte a los que estábamos ahí, diciendo que era el rey de Finlandia, era muy extraño, pero era solo un loco, uno más que le gusta gritarle a las personas. En eso me encuentro con un argentino amigo mío que me dice si lo acompañaba a comprar un agua porque estaba sediento, yo le respondí que los arboles solo pierden las hojas en otoño, que no espere que suceda ahora porque no va a suceder y seguí caminado, el me miro y me dijo luego de unos segundos, con un tono de vos alto y a la distancia, que él no fue, pero no le di importancia a sus sabias palabras y segui caminado de espalda como era normal para esta época del siglo, y me encere en la primer cabina de teléfono público a esperarte, a esperar que llegue ella, el amor de mi vida, la culpable de mi locura, de mi hermosa locura.

Luego de mi bonito paseo y la larga espera, me a fui a dormir a la residencia, en el ascensor me cruzo con el hombre del tranvía, el filandes que resulto llamarse Tatú, nos miramos fijo a los ojos como desafiándonos o esperando que el otro haga algo, hasta que el ascensor se detuvo y él bajo, yo seguí dos pisos más arriba, entre a la habitación y me acosté a dormir pensando en mañana volver a la cabina de teléfono público y sin saber que al otro día comenzaria mi espera cometiendo un error, aquel erro, y solo por sentir.

Te amo.

Soy José, José Desalanques.



Todos nacemos locos. Algunos continúan así siempre.

Samuel Beckett (1906-1989) Poeta y novelista irlandés.


En el amor siempre hay algo de locura, mas en la locura siempre hay algo de razón.

Friedrich Nietzsche (1844-1900) Filosofo alemán.


En asuntos de amor los locos son los que tienen más experiencia. De amor no preguntes nunca a los cuerdos; los cuerdos aman cuerdamente, que es como no haber amado nunca.

(Jacinto Benavente)



De poetas, tontos y locos, todos tenemos un poco.



1 comentario:

  1. De poetas, tontos y locos, todos tenemos un poco... un abrazo grande jo!

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